Cuanto viven los gatos
La longevidad de nuestra mascota dependerá de los cuidados que reciba a lo largo de toda su vida. Un gato que vive en un hogar tiene una perspectiva de vida de más de 12 años. Con un poco de vigilancia y control conseguiremos que nuestro animal viva el mayor tiempo posible.
Los gatos como la mayoría de los animales domésticos, envejecen mucho más rápido que los seres humanos. De hecho un error muy corriente es pensar que cada año humano equivale a siete años de un gato. La mayoría de los expertos coinciden en afirmar que el envejecimiento felino es mucho más rápido durante sus dos primeros años de vida.
Existe una tabla de equivalencias que refleja que cuando un gato cumple un año de vida, en realidad es como si estuviera cumpliendo 15. Con dos años de edad, el mismo gato, sería un joven de 24. A partir de esta edad, cada año que pasa envejece aproximadamente cuatro años.
Generalmente los gatos viven más que los perros. Mientras que un gato callejero presenta una esperanza de vida de 3 a 6 años, uno que vive en un hogar, tiene una perspectiva de más 12 años. Incluso un gato bien cuidado puede vivir hasta 20 años o más.
Se podría decir que la longevidad de un gato depende fundamentalmente del cuidado que reciba. Los felinos se caracterizan fundamentalmente por ser animales muy curiosos e independientes. Estos rasgos de su personalidad son los que hace, que estén continuamente expuestos a peligros. Pero simplemente con un poco de vigilancia y control, lograremos que nuestra mascota salga sana y salva de algún que otro incidente y viva el mayor número de años posibles.
Vamos a conocer los peligros más comunes a los que se puede exponer nuestra mascota:
PELIGROS DEL GATO CUANDO SALE DE CASA
Como hemos dicho, los gatos son muy independientes y curiosos. Además en la medida en la que nuestra mascota va creciendo, va aumentando su necesidad de salir a la calle. Lo ideal sería que nuestro felino no saliera de casa y si lo hiciera fuera bajo nuestra supervisión. Los peligros más frecuentes a los que se somete nuestra mascota cuando sale del hogar son los siguientes:
Accidentes
Un gato casero, en sus primeras incursiones, tiene pocas habilidades de supervivencia, y las posibilidades de tener algún incidente son elevadas. Es muy probable, que en sus primeras salidas se encuentre alguna carretera que cruzar, dónde puede ser atropellado. También puede toparse con alguna trampa o puede ser atacado por algún perro. Otros accidentes, pueden suceder al cruzar de un tejado a otro, o al subirse a una valla. También pueden comer comida envenenada o quedarse encerrados en algún lugar.
Contagio de enfermedades
La posibilidad de contraer enfermedades contagiosas es muy frecuente en un gato que callejea mucho. Cuando una gata está en celo, las peleas entre los felinos para conseguir a la hembra son muy habituales. Las heridas que surgen de estas riñas provocan graves infecciones y contagio de enfermedades.
Posibilidad de tener camadas no deseada
Cuando una gata está en celo, tendrá una necesidad imperiosa de salir de casa para aparearse con otros gatos. De hecho las posibilidades de que regrese embarazada si consigue salir del hogar son altísimas. Es por ello, que es fundamental evitar las salidas cuando nuestra mascota está en este estado.
Por otro lado, hay que tener muy en cuenta, que los gatos que nacen de una camada no deseada, tienen muchas posibilidades de vivir una vida desafortunada.
La mayoría de los expertos aconsejan la castración como el mejor remedio a las salidas de nuestro animal. La necesidad de salir del hogar disminuye notablemente cuando nuestro gato esta castrado.
PELIGROS DEL GATO DENTRO DE CASA
Que un gato viva dentro de un hogar, no nos garantiza que su vida sea larga. De hecho cuando nuestra mascota vive con nosotros en casa, se enfrenta a determinados peligros, veamos alguno de ellos:
Riesgo de padecer obesidad
La obesidad es muy habitual en un gato doméstico si no se tiene un poco de cuidado. El gato que vive dentro de casa apenas está motivado para realizar ejercicio. Suele pasar la mayor parte del día durmiendo o tumbado. Además, no ha de pelearse por el sustento de su comida y su comedero está siempre disponible.
Para controlar la obesidad en los gatos de casa, es importante medir la cantidad de alimento que ingiere al día. Es bueno proporcionarle pienso bajo en calorías y con un nivel moderado de fibra. También es recomendable incitarle a que haga ejercicio, con pelotas y juguetes para gatos.
Muda continua
La muda de pelo de un felino se rige por los foto-períodos. Los gatos que viven en la calle están sometidos a los cambios de temperatura y sólo pierden pelo en determinados períodos estacionales.
Sin embargo, el gato casero está expuesto a más horas de luz natural y artificial, con una temperatura más o menos constante todo el año. Digamos que en invierno no pasa frío por la calefacción y en verano no pasa calor por el aire acondicionado. Esto provoca que sus mudas no se realicen en los ciclos naturales. El resultado es que el animal está perdiendo pelo de manera constante durante todo el año.
Para favorecer la salud del pelo de los gatos caseros que están en constante muda, es recomendable darles alimentos específicos para el cuidado de su pelo y piel.
Bolas de pelo
Otro signo habitual en los gatos caseros son las bolas de pelo. Las bolas pueden presentar además de pelos, restos de alimento, de secreciones gástricas o de materiales vegetales.
Un gato sano se cepilla mediante el lamido. Su lengua es rugosa debido a la presencia de una especie de espículas o papilas que actúan como un cepillo. Con su lamido, arrastra el pelo muerto y se lo traga. Posteriormente este pelo transita por el tracto digestivo y normalmente es excretado por las heces o regurgitado, provocando en el felino una especie de incómoda tos seca. En ocasiones, cuando ingiere demasiado pelo, o si el proceso de digestión se ve alterado por algún problema, las bolas de pelo se acumulan en el estómago o en el intestino.
Para evitar la formación de bolas de pelo es recomendable cepillar frecuentemente a nuestro gato y administrar productos apropiados para su eliminación.
Accidentes domésticos
Los gatos, además de curiosos, son extremadamente juguetones y dentro del hogar siempre buscan algo con lo que jugar. Los cables eléctricos provenientes de televisores, equipos de música o lámparas despiertan un gran interés en ellos y siempre los buscarán para morderlos. Para evitar que sufran una descarga, es conveniente camuflarlos. En las ferreterías existen unos elementos llamados cable-canal que nos pueden ser de gran utilidad para cubrir los cables.
Hilos, alfileres, medicamentos, alguna planta tóxica o huesos de restos de comida, también constituyen un peligro para nuestro gato, ya que si están a su alcance, casi seguro que los morderá.
La cocina es uno de sus lugares preferidos, sobre todo si estamos cocinando. Siempre se acercarán al olor de un buen guiso, por lo que hay que estar muy pendientes de que no se quemen con los fogones o con la vitrocerámica. También hay que tener cuidado a la hora de poner la lavadora, ya que no es de extrañar, que nuestro animal esté durmiendo la siesta en el tambor. Es frecuente también encontrarlos dentro de los armarios o en alguna bolsa. Siempre investigarán en los lugares más inhóspitos de la casa.
Debemos tratar de no tener las ventanas abiertas si vivimos en un piso, ya que también existe la posibilidad de que se caigan y aunque es cierto que soportan caídas desde elevadas alturas, no son infalibles y una mala caída se puede convertir en algo lamentable.
LA VEJEZ EN LOS GATOS
Si las condiciones de vida de nuestro animal han sido excepcionales, los procesos degenerativos que llegan con la edad pueden retrasarse. Las mascotas mayores pueden tener más o menos problemas médicos dependiendo de la nutrición y de los cuidados que ha recibido a lo largo de toda su vida.
Generalmente, a partir de los 10-12 años los felinos se vuelven más perezosos y comienzan a dormir más rato en su cojín o rincón favorito. También a esta edad empiezan a engordar paulatinamente si no se tiene cuidado. Por eso, el cuidado de la alimentación es muy importante a medida que nuestro gato envejece. Los veterinarios recomiendan dar muchas raciones de comida en pequeñas dosis a los gatos avanzados en edad. Los alimentos secos son excepcionales para la dentadura de nuestra mascota, ya que este tipo de comida elimina los depósitos de suciedad en los dientes. También es fundamental que el agua esté siempre fría, pues los felinos descontrolan la temperatura corporal y al no sentir que necesitan líquidos, pueden terminar deshidratados.
Si durante toda la vida del animal es conveniente vigilar siempre su salud, cuando llegan a la vejez, debemos aumentar aún más el control de su estado físico y acudir al veterinario de manera más frecuente.
En esta faceta de la vejez, nuestro minino suele necesitar mucha más atención y un trato especial. Cuando un gato es anciano necesita bastante amor y muchos mimos.
En definitiva, si tenemos en cuenta todos estos aspectos descritos en este artículo, y cuidamos de manera responsable a nuestro gato, seguramente conseguiremos que esté haciéndonos compañía, el mayor número de años posible.
Tabla de edad felina
Edad seres humanos Edad gatos
1 año 15 años
2 años 24 años
4 años 32 años
6 años 40 años
8 años 48 años
10 años 56 años
12 años 64 años
14 años 72 años
16 años 80 años
18 años 88 años
20 años 96 años
21 años 100 años
Nota: esta tabla sólo sirve de referencia actualmente, ya que los veterinarios aseguran que los gatos cada vez viven más años.
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admin
1 aсo 15 aсos 2 aсos 24 aсos 4 aсos 32 aсos 6 aсos 40 aсos 8 aсos 48 aсos 10 aсos 56 aсos 12 aсos 64 aсos 14 aсos 72 aсos 16 aсos 80 aсos 18 aсos 88 aсos 20 aсos 96 aсos 21 aсos 100 aсos Nota: esta tabla sуlo sirve de referencia actualmente, ya que los veterinarios aseguran que los gatos cada vez viven mбs aсos.